Por Teresa Galindo Lozano
La Ruta del Caloret o Tras las huellas de Rita, realizada recientemente por el colectivo periodístico Xarxa Urbana, tuvo gran aceptación entre la ciudadanía y contó con una gran repercusión mediática, porque su singular itinerario tenía como objetivo analizar los efectos que sobre la ciudad han tenido, las decisiones políticas de la exalcaldesa Rita Barberá –ahora senadora- e investigada por el caso de corrupción Taula y posiblemente por incumplir la Ley de Memoria Histórica.
En las puertas de las Corts Valencianes medio centenar de ciudadanos iniciaron un recorrido de cuatro horas, para visitar los lugares que han sido escenario de casos de despilfarro, corrupción o abandono y que están relacionados de una u otra forma con el gobierno municipal de la exalcaldesa cuya imagen pública continúa en declive, salpicada por las investigaciones que se adelantan contra varios miembros de su equipo y por las que finalmente la justicia también la investiga.
Además de la información presentada por Miguel Ángel Ferrís, los asistentes pudieron escuchar el testimonio de los políticos de Esquerra Unida Ignacio Blanco y Rosa Pérez, quienes tras varios años de investigación sobre facturas, adjudicaciones fraudulentas, sobrecostes de obras, contratos amañados y otras malas prácticas del Partido Popular , han evidenciado corrupción y despilfarro de dinero público tanto en la Generalitat Valenciana, como en la Diputación Provincial y en el Ayuntamiento de Valencia.
Calatrava no nos calla
Ignacio Blanco se refirió al trato privilegiado que el gobierno valenciano dió a su arquitecto estrella, Santiago Calatrava, adjudicándole contratos sin publicidad y pagándole cuantiosos honorarios que salían del coste final de cada proyecto inflado por los sobrecostes del complejo cultural de la Ciudad de las Artes y las Ciencias –CAC-, una obra que costó casi 1.300 millones de euros – tres veces más que su presupuesto inicial-. Por estos diseños Calatrava ganó 100 millones de euros y no pagó IVA ni impuestos en España porque su domicilio fiscal lo tiene en Suiza.
Por todo ello, Blanco y otros compañeros de partido abrieron en 2011 la página web “Calatrava te la clava”, para publicar la información que iban recopilando en sus investigaciones, pero tras la demanda que interpuso el arquitecto a Esquerra Unida a comienzos de 2014 por “intromisión en su honor” y la exigencia de 600.00 euros, el juez se pronunció y ordenó el cierre del dominio y el pago de 30 mil euros. Para dar cumplimiento a la sentencia la página paso a llamarse desde mayo de 2014 “Calatrava no nos calla” .
Rita Barberá y Francisco Camps -como presidente de la Generalitat Valenciana- decidieron convertir a Valencia en la ciudad de los grandes eventos, de las grandes obras, de los excesos y de los millonarios gastos de dinero público como el que se hizo en la CAC.
Bienes religiosos para usos “mundanos” que no pagan IBI
En la plaza de la Almoina Guillermo González, portavoz de Valencia Laica , se refirió al estudio que hizo su entidad sobre 1253 inmuebles de la Iglesia Católica en Valencia exentos del pago del IBI, a pesar de que se les da un uso no religioso e incluso lucrativo, infringiendo la ley y el acuerdo con la Santa Sede de 1979. Estiman que de la larga lista solo 155 propiedades tienen uso religioso, mientras que 1098 se destinan a fines tan “mundanos” como centros privados de enseñanza, clínicas estéticas, inmobiliarias, restaurantes o aparcamientos, entre otros. Esta situación ha sido posible con la complicidad de la que fuera alcaldesa por casi un cuarto de siglo, “que no hizo nada por sancionar el fraude ni por recaudar los tributos”.
La diputada que desenmascaró a Rus
En la puerta de la Diputación Provincial a la hora acordada, la diputada Rosa Pérez esperaba al grupo para compartir su experiencia de investigar las irregularidades que encontró desde su llegada a esa administración y su convicción de destaparlas. Para desenmascarar la trama de corrupción de esa entidad dedicó muchas horas a recopilar información, contrastar datos y a establecer relaciones entre políticos y beneficiarios de obras o contratos. Su labor de denuncia ha dado origen al caso Taula, que ha removido a los políticos corruptos que se creían blindados con un escudo de impunidad.
Advirtió que no podía comentar nada que no estuviese ya publicado, porque aún hay información que es reserva del sumario de caso Taula, tristemente famoso porque investiga delitos de malversación, fraude, prevaricación, tráfico de influencias y falsedad, en los que están implicados más de 28 altos cargos, entre ellos Alfonso Rus -expresidente de la Diputación y del PP provincial-.
Indico que “había expedientes que encarecían mucho los procedimientos, incluso con informes desfavorables de funcionarios y se seguían haciendo”. A los Ayuntamientos no se les daba el dinero para que hicieran sus obras prioritarias, ya que desde la Diputación se dirigían las inversiones y se otorgaban contratos por amiguismo.
Señaló además que en el Ayuntamiento de Valencia encontraron “apaños” por la reparación de las Torres de Quart, de la Pasarela, de la Rambleta y de la Mostra Valencia. Y para aclarar lo que ha pasado y establecer responsabilidades, han pedido que también se investigue a la excalcaldesa Barberá.
Resistir es vencer
Por su parte, los vecinos del Cabanyal y del Centro Histórico expusieron sus particulares luchas – Salvem El Cabanyal y Asociación de Vecinos del Carmen– para preservar sus barrios, amenazados o abandonados por la anterior administración local que priorizó los grandes eventos, la urbanización especulativa y una falsa modernidad a costa de sus habitantes y del patrimonio histórico y cultural de la ciudad.
Con la convicción clara de que resistir es vencer, Maribel Domenech de Salvem El Cabanyal, expuso a los asistentes que el proyecto de ampliación de la Avenida Blasco Ibañez atravesando el barrio -aún pesar de haber sido declarado en 1993 Bien de Interés Cultural-, fue un empeño de Barberá, que no se detuvo en su intención de querer partir el conjunto histórico “como si fuera una naranja”, y a su paso demoler de forma indiscriminada más de 1600 viviendas que incluían tesoros arquitectónicos del modernismo popular como la Lonja de Pescadores entre otros.
Recordó que en estos diecisiete años de lucha, han vivido momentos buenos y malos como en el 2008 cuando el Tribunal Supremo desestimó los recursos presentados por la Plataforma contra el Plan Urbanístico y le dio la razón al gobierno municipal. O en 2009 cuando celebraron en grande la Orden del Ministerio de Cultura que indicaba expolio del conjunto histórico por las actuaciones derivadas del Plan Especial de Protección y Reforma Interior de Cabanyal-Canyamelar (PEPRI) y ordenaba la paralización de los derribos. “Continuamos defendiendo la tesis de rehabilitar sin demoler, porque un conjunto histórico si lo atraviesas, deja de serlo” advirtió Domenech.
La resistencia ciudadana de Salvem el Cabanyal, ha sido un talón de Aquiles para el gobierno de Barberá, y según su portavoz “hemos tenido el coraje de perseguir a Rita por Europa. Cuando ella se presentó ante la Unesco y dijo que respetaba los Derechos Humanos “nueve vecinos organizamos un viaje de ida y vuelta a París en camioneta, con el fin de extender una pancarta y denunciar que ella vulneraba los derechos humanos de los que presumía”. Lo mismo hicieron en 2002 cuando anunció en el Parlamento Europeo la American Cup’s -otro gran proyecto ruinoso-, en aquel momento ya tenían amigos y se habían hermanado con un barrio de Hamburgo que había sufrido lo mismo con un proyecto especulativo que quería destruirlo y habían vencido”.”
La cohesión social, la energía y las ganas de visibilizar la injusticia han sido elementos claves para que Salvem el Cabanyal le haya ganado el pulso al Ayuntamiento. “En Valencia se han ganado muchas batallas y si estás en una lucha ciudadana diez años, es que ya no importan veinte, porque sabes que la persistencia te lleva a la victoria, y si no crees en eso, no puedes estar en la resistencia” -indico la portavoz-.
Burkas para tapar el abandono
Antes de entrar en el solar donde permanece abandonado a su suerte el trozo de la muralla islámica más grande que tiene Valencia, los participantes se taparon la cara con la “burka de la vergüenza”, con la que Xarxa Urbana quiere visibilizar el abandono de más de 400 edificios a los que se le ha puesto esa red plástica que esconde su estado de ruina o simula una rehabilitación que no se hace. En palabras de Juan de la Asociación de Vecinos del Carmen “lo poco que se arregla en el Carmen es porque le hemos exigido al Ayuntamiento que no deje caer los tesoros que esconde la zona, además de su gran atractivo turístico tenemos que conservarlos para las futuras generaciones”. Y recordó a su compañero Miguel Viergo –fallecido recientemente-, como uno de los vecinos que más luchó porque se rehabilitara la muralla islámica y su entorno.
Los refugios, arquitectura olvidada
A todo esto hay que añadir, la participación del exconcejal del PSOE Matías Alonso, quien explicó diversos aspectos que tienen que ver con la Ley de Memoria Histórica y que Barberá ignoró, como no quitar símbolos franquistas de las calles y de algunos edificios públicos, permitir el deterioro de los refugios antiaéreos, remover las fosas comunes del cementerio general dónde estaban enterradas miles de víctimas del franquismo o aplicar su filtro ideológico para impedir cualquier actuación de recuerdo a los republicanos.
Señalando las descoloridas letras del rótulo del refugio antiaéreo de la calle Serranos, cuyo diseño -Art Decó- se atribuye a Josep Renau, indicó Alonso –exconcejal del Psoe- que “este refugio fue un arma de vida, aquí a nadie se le preguntaba si era de izquierda o de derecha, aquí salvó la vida gente de toda edad, tipo y condición y no se le pedía el carné para entrar”. El estado de abandono de “éste y de otros más de 200 refugios sobre los que poco o nada se conoce” es incomprensible dada la importancia histórica y funcional de esta arquitectura.
También recordó que en el 2004, el profesor Jorge Vera del grupo por la Protección de la Memoria Histórica, les solicitó apoyo para que el Ayuntamiento les permitiera instalar en el refugio de Serranos una colección de objetos históricos y mostrarlo a los visitantes. Alfonso Grau –mano derecha de Barberá -e implicado en blanqueo de capitales del PP- se negó rotundamente, porque “tal vez lo que se ha intentado, es que no nos acordemos de quien tiraba las bombas” concluyó Alonso y lamentó que esa colección que se le quería ceder a la ciudad hoy se exhibe en un museo londinense.
Finalizó su intervención mostrando una Guía Turística editada en 2007 por el Ayuntamiento de Valencia, que incluye como uno de los puntos que sugiere visitar el “Monumento a los Caídos” –se trata de la conocida Puerta de la Mar-.
Poesía sonora y crítica
La poesía también tuvo lugar en este encuentro. En el palacio del pintor Joan de Joanes – hoy Casa Inssa-, el poeta Jesús Ge deleitó a los asistentes con un recital donde las metáforas cargadas de reflexiones despertaban la risa y las palabras cobraban nuevo sentido. El poema más esperado fue “La Barba Irritada”, una creación que se actualiza con el tiempo y que le ha valido el calificativo de “Poeta Anti-Rita”.
Antes de comenzar su repertorio de poesía sonora, Jesús Ge, hizo un análisis del estado de abandono de la cultura durante la administración Barberá. Mencionó casos como la mala gestión del teatro El Musical –de titularidad municipal-, adjudicado al empresario José Luis Moreno, quien dejo cuantiosas deudas en Hacienda, en la Seguridad Social e impago de salarios a sus trabajadores.
O el recorte de subvenciones a las bandas y escuelas de música que eran las que de alguna manera nutrían la base de la música valenciana “extraña coincidencia, cuando se empieza a construir el esperpento cultural de la Ciudad de las Artes y las Ciencias se recortan las subvenciones”.
Otro caso al que se refirió , fue el cierre de la antigua sede del Carme Teatre en la calle Gutemberg. “Un informe técnico municipal declaró el edificio en amenaza de ruina, y para rehabilitar e insonorizar la sala sus gestores pidieron durante años un permiso de obras que no se les dió. Entretanto, el Ayuntamiento declaró el entorno como ZAS -Zona Acústicamente Saturada- y determinó que allí no podría funcionar nada que superara cierto volumen, a pesar de que los pocos vecinos del local nunca se quejaron por ruido. Destaca que el vecindario está casi deshabitado, porque un constructor fue comprando viviendas para hacer allí un gran proyecto inmobiliario. Al final Carme Teatre se trasladó a otra sede “porque evidentemente la cultura no se para, a pesar de todo, no podéis detener la cultura”.
“El mundo de la cultura sigue moviéndose a pesar de las dificultades que la Administración ha estado poniendo hasta ahora”, esto se confirma con el surgimiento de festivales pequeños, “ los barrios se han ido organizando para llevar adelante propuestas culturales” -enfatizó el poeta-.
Para Jesus Ge “si unimos los puntos nos da una línea que es el ataque directo a la ciudadanía, un robo continuo, porque no lo podemos llamar de otra manera. Uno puede estar de acuerdo o no con determinadas ideologías, pero lo que no se puede admitir, son delincuentes en nuestro gobierno. Gracias al voto democrático de los ciudadanos conseguimos echar a quienes estaban esquilmando los fondos tanto de la Ciudad como de la Comunidad, e iniciamos un nuevo camino”.
No al derribo de la memoria artesanal
Una de las últimas paradas fue en el taller artesano u obrador de la familia March, que está en peligro de demolición si se lleva adelante un proyecto urbanístico del Ayuntamiento de Valencia que pretende su derribo para dar paso a una plaza. Para Pepe March, si el Ayuntamiento derriba su casa, no solo borraría parte de la historia artesanal y económica de la ciudad, sino que estaría en contra del programa europeo “Restauro” que en 2002 les permitió rehabilitar el taller y conservar algunas obras y herramientas de cerámica, forja, joyería y escultura, en cumpliendo de su objetivo de “revitalizar los centros históricos, fomentar las actividades tradicionales y conservar los edificios singulares”.
A favor y en contra
Cabe destacar que por primera vez en los tres años en que Xarxa Urbana realiza estas rutas, los medios de comunicación de todo el país y de diferentes líneas editoriales se interesaron por el cubrimiento de esta “procesión laica” centrada monográficamente en la controvertida figura de la exalcaldesa y hoy senadora -aforada-.
Sobre el recorrido hay opiniones diversas. Para muchos esta forma de crítica política además de ser novedosa, es un acierto porque facilita la participación ciudadana y da voz a distintos protagonistas que abiertamente ofrecen su versión sobre los temas propuestos. Otros de ideología más conservadora, se preocupan más por los efectos negativos que pueda tener la Ruta del Caloret para la “marca Valencia” asociada a la corrupción y al despilfarro, que por reflexionar sobre las causas que la han generado y el castigo a los culpables. Solo una minoría no entiende, que la Ruta al igual que las otras 17 que ha impulsado Xarxa Urbana desde la Ruta del Despilfarro de Valencia -iniciada en 2012-, son una propuesta informativa, interactiva y crítica -según sus promotores- y norutas turísticas como insisten en llamarlas algunos medios.